Mediante un sistema de gestión ambiental, basado en la norma ISO 14001, la organización incorpora la variable ambiental a sus procesos y cuenta con un marco de referencia para proteger el medio ambiente y responder a las condiciones ambientales cambiantes. Este sistema permite identificar los aspectos de la actividad que producen un impacto negativo en el medio ambiente, así como, plantear objetivos de mejora y un programa de gestión para lograrlos. Su implementación también asegura la aplicación de la legislación vigente en materia ambiental ofreciendo garantías de su cumplimiento.
La perspectiva del ciclo de vida, que incorpora el sistema sobre la forma en la que la organización diseña, consume, distribuye y produce sus productos o servicios, previene que los impactos ambientales sean trasladados a otro punto del ciclo de vida. Asimismo, la gestión integral de los riesgos y oportunidades y la identificación y análisis de todas las partes interesadas permite incorporar la gobernanza ambiental a su sistema de gestión global.
Este enfoque del sistema permitirá a la organización mitigar el impacto ambiental asociado a su actividad a través del ahorro de recursos, la minimización de las emisiones y la disminución de la generación de residuos, contribuyendo a la protección del medio ambiente y a la sostenibilidad del entorno en el que opera. Por su parte, el hecho de contar con un sistema de gestión ambiental evidencia el compromiso de la organización con el medio ambiente, posicionando a la entidad en un lugar preferente frente a sus competidores en un entorno cada vez más comprometido con la sostenibilidad.
Otra de las ventajas para la organización es la reducción de costes ya que a través de la gestión ambiental se identifica la utilización de los recursos y sus deficiencias. El mejor uso de la materia prima disponible junto con la gestión integral de las operaciones que realiza aumentará la eficacia de los procesos en la organización.
El sistema también mejora las relaciones con terceros y ayuda a satisfacer a los clientes, muchos de ellos cada vez más implicados con el medio ambiente y sostenibilidad.
Meat 2030 nace como respuesta técnica ante los retos estratégicos sostenibles, la captación y gestión de los fondos Next Generation de la UE en materia medioambiental, así como para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la industria cárnica española.